Para los esquiadores que acaban de aterrizar en el destino de esquí de sus sueños y quieren una alta potencia para aprovechar al máximo su día, el WRC es el arma de la línea Firebird. Combina una actitud de rock ‘n’ roll con la ingeniería austriaca para respaldarlo, perfectamente ajustado para la precisión, la estabilidad y la velocidad máxima. La magia del WRC están las tecnologías de carbono, C-Spine y C-Armor, emparejadas con una construcción de flanco de compuesto sándwich de doble titanal, lo que resulta en un esquí sensible que sabe que eres tú el que está detrás del volante.